La delegación de República Dominicana que participó en la Asamblea 41 de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) presentó varias notas de estudio y de información, enfocadas en el asunto sobre instrucción y creación de capacidad en materia de aviación civil, las cuales fueron acogidas por la asamblea y, posteriormente serán sometidas ante el consejo de esa organización.
Las propuestas de medidas sustantivas hicieron énfasis en la necesidad de capacitación que requiere el sector de la aviación para la gestión del cambio en situaciones adversas, la implementación de una técnica de análisis para la detección de necesidades de capacitación, la consideración de la unidad de inteligencia de instrucción en aviación como parte de la estructura orgánica de las organizaciones de instrucción autorizadas (ATO) y la ejecución de entrenamientos enfocados a garantizar la gestión colaborativa de la afluencia del tránsito aéreo (ATFM) de forma segura, eficaz y eficiente.
La Academia Superior de Ciencias Aeronáuticas (ASCA), órgano de capacitación del Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC), en la persona de su directora, Clara Fernández, presentó las notas de estudio, destacando que la República Dominicana ha venido desarrollando importantes acciones en materia de capacitación para generar capacidades en ámbitos específicos de la formación aeronáutica.
Resaltó que el país es el primer Estado de habla hispana que desarrolló en conjunto con la OACI un paquete de instrucción normalizado para la formación en ATFM/CMDN a través de la ASCA, que proporciona al personal aeronáutico las competencias para aplicar con seguridad y eficiencia los procedimientos que garantizan la gestión colaborativa de la afluencia del tránsito aéreo.
En ese sentido, la representante dominicana recomendó a las autoridades de aviación civil ponderar la inclusión en sus programas de la capacitación citada para fortalecer el desempeño en materia de Navegación Aérea, ante los desafíos que presenta el aumento del tránsito aéreo en el mundo.
Igualmente, exhortó la necesidad de crear capacidad para la gestión del cambio en situaciones adversas a la aviación, un área de entrenamiento poco valorada aún en el sector, pero que agrega valor a los procesos de implementación que se realizan para la aplicación de nuevas tendencias tecnológicas y en la adecuación de las normas y métodos recomendados por la OACI.
En la nota de estudio ‘’La inteligencia de instrucción en aviación (ATI) como parte de la estructura de las organizaciones de instrucción reconocidas (ATO)’’, Fernández invitó a los Estados a evaluar la capacidad de las organizaciones de instrucción reconocidas para gestionar de forma integrada la inteligencia de instrucción en aviación desde las estructuras de sus organizaciones.
En el conclave internacional que reúne representantes de 193 Estados, el país recomendó la implementación una técnica eficiente y estandarizada para la detección de las competencias necesarias del personal aeronáutico, con miras a crear las capacidades técnicas y gerenciales precisas que permitan alcanzar los objetivos estratégicos y operativos de las organizaciones de aviación civil.